Una de las películas más exquisitamente construidas de este año -- las interpretaciones de Weisz y Hiddleston, tan volátiles como la marea. La dirección de arte y cinematografía, compactas y delicadas. La muy orgánica y elegante edición, junto a la desconsolada banda sonora. A través de sus ciegas mentalidades te advierte sobre el tener que elegir entre la pasión y el amor sin haber entendido ambos. Recomendada.
**** 1/2