¿Precisa? No, ¿pero de verdad importa? Sin dudas uno de los debuts directoriales más vertiginosos y autorales de los últimos tiempos, con una edición tan sutilmente caleidoscópica, y una actuación de lujo de parte del mismo director: la actitud de mierda rara vez es materializada con tanta exactitud e inmersión. Furiosa, inexplicable, e imparable. Todo un jazz.
★★★★ ½