Cómo es que una película con tanta lujuria por la vida, con tantos parajes, y con todo ese reparto puede ser tan... tan aburrida. Nada ocurre aquí. No se forma ni un tipo de historia o estudio de lo mucho que evade el conflicto, y el muy poco que tiene es lo mejor que ofrece en las dos horas y media de hedonismo beatnik. Mejor desviénse.
* 1/2