Prácticamente lo mismo, sólo que sin Will Smith -- un dealbreaker, quizás, pero lo fundamental está ahí, no más con mayores y más modernas proporciones visuales. ¿Sólo para quiénes la pidieron, entonces? Divertida y nostálgica a ratos; pero se le nota la falta de innovación. Los veteranos siguen tal cual, pero los nuevos ni lo intentan.
** 1/2
Detallada en lujo y decadencia, pero qué aburrimiento más pretencioso. Cada línea aquí pareciera tener un adjetivo o un sustantivo de más, a tal punto que más que parecer refinada suena inverosímil; se desarrolla muy, muy lentamente hacia un cierre ya conocido; y Tom Hiddleston, por más protagonista que sea, es lo más narrativamente tangencial aquí.
* 1/2