Esta película existe para que los actores pasaran un buen rato y poco más, que no tiene mucho que contar fuera de la simpatía en el reparto, Vincent D'Onofrio y sus buenas, aunque anónimas secuencias de acción. Son dos horas y algo de "nada especial". Partes interesantes que forman un todo bastante insípido, maratónico y olvidable.
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