Esta serie está suplicando una criogenia, que no podría estar más aburrida de sí misma. Personajes insípidos y tan incompetentes que distraen, un monstruo ícono que evidentemente se quedó sin nuevo material, y una trama que evita toda sutileza posible. Fassbender y el diseño de producción son por lejos lo mejor, pero aún así se desaprovechan: cero tensión, cero interés.
★ ½