Un rato boludísimo pero hecho muy bien. Esto es muy lo que es y poco más, pero Spielberg no la había pasado así de la raja desde Tintin: fenomenales secuencias de acción, ambiciosas ambientaciones, y una lista interminable de referencias, pero todas con propósito: del cameo al tributo; si una aparación invitada no aporta a la historia, al menos te da un escalofrío de hype.
★★★★ ½