Si fuera un videojuego, sería un genial beat 'em ups con todo su parkour, su prisa, y su inagotable horda de enemigos; pero como película, es esencialmente 90% acción, 10% trama. Al menos su acción es variada y muy bien coreografeada y editada, pero la historia no sólo es raquítica, sino que no hace mucho sentido. Aún así, nunca llega a aburrir.
** 1/2