Técnicamente audaz, pero quizás no la más funcional para los más pragmáticos. Todo aquí está diseñado para implicar y hacerte imaginar terribles realidades (y a ratos funciona bien), pero objetivamente unos hombros cubren 3/4s de la pantalla y el resto es un borrón fuera de foco. Y la trama... pues aunque lidie con la fuerza de la fe, puede ser exasperante.
** 1/2