Sensual, secretiva, agresiva, y con un gran lujo visual, pero demasiado larga y dispar. Es una película de velocidades muy opuestas: te entumece con trasfondos, conversaciones y gajes del oficio, o te despierta con erotismo, violencia y furtividad; y maratónica al punto de que sería mejor como dos filmes complementarios a lo Disappearance of Eleanor Rigby.
★★ ½