Para la mayoría más joven (incluyéndome), no podría serles la película más fascinante del mundo... y honestamente, no creo que la técnica le haga muchos favores sea como sea. Trata de evocar un sentimiento muy Linklater en el ocaso de la vida, pero es tan ciega en lo de querer contar todo a través de onces que por cortesía evita caer en la intimidad.
** 1/2