lunes, 29 de febrero de 2016

ADDENDUM: Las 5 películas más decepcionantes del 2015 (que vi).


Um...
#6 - Ted 2, de Seth MacFarlane

Bueno, sí. Este año creo que fue el peor que me ha tocado en lo que llevo manteniendo Bijou Reviews. Habré visto su una que otra película peor antes, pero nunca he visto más películas malas y mediocres en un sólo año. Al menos, esa es la sensación que me dejaba el cine mes a mes. Encontrar cosas a las cuáles verdaderamente aferrarme me fue particularmente díficil, que apenas fui capaz de hacer un top 20 completamente sincero este año, mientras que la competencia por lo peor no pudo haber sido más feroz.

¿Cuán malo fue este año? Un * 1/2 es demasiado bueno para estar en este ranking, y si hubiese tenido las energías, hubiera hecho de este un Top 10 de lo peor del 2015 porque me alcanzaba para ello. Los meses iban y venían y la mayoría de las películas simplemente me eran una nada indescriptible que me entraba por un oído y me salía por el otro. Mis películas más anticipadas me fallaron rotundamente como Avengers 2, Spectre y Star Wars, y las que me ofrecía el circuito de premios simplemente no me llegaban. Spotlight, The Big Short, The Revenant... ya, bueno, pero qué más dan. Estarán bien hechas y en sus ciertas competencias son bastante respetables, pero no son el tipo de películas por las que me emociono por ir al cine -- ni por toda esa cinematografía de Chivo, quién en el transcurso de tres años fue de justo y tardío vencedor a estar sobrerrecompensado (e Iñárritu... uf. El tipo se tiene que tomar un descanso considerable. Se tiene que ir. Se volvió mi nuevo David O. Russell o Stephen Daldry ya por todo el reconocimiento sobrevalorado que ha tenido en tan poco tiempo).

Y la cuestión es que siempre pudo ser peor. No fui a ver toda película que se me puso frente a mí, pero me salté Aloha, Pan, The Cobbler (... de Tom McCarthy. Sí, el de Spotlight), Irrational Man, The Maze Runner: The Scorch Trials, By the Sea, The Seventh Son, The Program, etc. Tantas otras opciones que pude haber visto pero ignoré a consciencia de lo malas que eran. En algún punto del año tuve que reconocer que ya era suficiente, incluso si se trataba de un director que respetaba y que le venía siguiendo los pasos de hace algún tiempo. No sólo las opciones que tenían a la mano me eran generalmente grises y sin vida, sino que las que me saltaba eran incluso peor.

En fin. Fue un año triste. Pasemos a las que se salvaron de ser vistas en más detalle:
  • Fifty Shades of Grey de Sam Taylor-Johnson. Dentro de todo me la imagino volviéndose una película de culto, que tiene una que otra escena legítimamente sexy, que gracias a The Weeknd podemos decir que es un filme nominado al Oscar, que la escena del contrato es tan mala que es brillante; pero fuera de todos estos positivos es tan inerte e inconsecuente como quedarse dormido a los 2 minutos de empezar a hacer el amor estando abajo. Zzzz.
  • Allende mi abuelo Allende de Marcia Tambutti Allende. Ya, que le lluevan todos los premios que quieran por tratarse de Allende y todo, pero no traten de hacérmela pasar como la nueva Stories We Tell. Esta película pudo haber sido un Powerpoint, y en vez del Director's Fortnight de Cannes se pudo haber estrenado en el quincho familiar de los Allende durante un asado, que como investigación, estos son puros fun facts familiares.
  • Jupiter Ascending de Andy Wachowski y Lana Wachowski. Uf. A estas alturas Redmayne, Tatum y Kunis son sobrevivientes, pero los Wachowskis... no sé si el mundo tendrá suficiente cariño hacia The Matrix como para perdonarles este abuso de confianza y gasto de dinero y esfuerzo (especialmente considerando que ellos mismos ya arruinaron The Matrix...). Derechamente vergonzosa.
  • Unfriended de Leo Gabriadze. Ok, no. Esta sí que es vergonzosa. Sea que se trate de una película sobre la Internet o no, ¿para qué molestarse en aprender edición, dirección de arte, diseño de vestuario o cinematografía si toda tu película es una sola toma continua de la pantalla de un computador, y tus personajes apenas se ven en diminutos cuadros de 320x240 que pelean por tu atención? Esta película va en contra de todo lo fundamental del hacer cine -- y no vengan con que es innovación barata, que Sean S. Baker estuvo haciendo Tangerine con su iPhone 5s mientras estos locos se contentaban con Skype y HyperCam. No hay excusas para algo tan descarada y condescendientemente anti-cine.

Entonces...

#5
Home
dirigida por Tim Johnson

Así que el año pasado mi película favorita fue How To Train Your Dragon 2. Lo dije antes y lo vuelvo a decir: ese era otro Dreamworks, era el de Dean DeBlois. Pero después de Home, creo que tengo que cambiar mi enunciado original: Dean DeBlois es demasiado bueno para estar en Dreamworks. Jeffrey Katzenberg, CEO de la compañía, fue citado diciendo que "su estrella del norte, su modelo a seguir, es Shrek". El ideal era repetir ese éxito a partir de un humor desenfrenado, espontáneo y popular, e intentos de ello se pueden ver en películas como Home, naturalmente, pero también The Penguins of Madagascar (la cual me salté porque, cough stefan kramer), y... sea lo que sea que será B.O.O.: Bureau of Otherworldly Objects. Título super prometedor, hay que decir.

Todo ese párrafo me deprime enormemente. Dreamworks, la misma compañía detrás de las de 'Dragon', Kung Fu Panda, Puss in Boots y Prince of Egypt, ignora todo su potencial para el drama, la emoción y la legítima aventura por el humor fácil y referencial. ¿Y Home es un ejemplo claro de ello? ¿Jim Parsons hablando en idioma lolcats como si estuviéramos en el 2006? ¿Rihanna, co-protagonista, cantando más de lo que habla en la película? O sea, ese es su talento principal... pero esto no es un videoclip. ¿Y personajes con nombres tan ingeniosos como "Oh" y "Boov"? ¿Y una trama que se reduce a cosas flotando y personajes bailando y festejando? "Mis manos se están moviendo en el aire como si a mi no me importase"... ah, la referencia. ¿Qué?

¿Este tipo de cosas es su ideal? ¿Es por esto por lo que nos deberíamos de emocionar por la compañía? Toda esta familiaridad y populismo me hiede a insignificancia. Y la cuestión es... ¿realmente Dreamworks necesita esto? Entre series animadas, cortos, licencias y películas live action, ¿de verdad necesitan cosas como Home para financiarse? Pixar a lo más hace una película y un corto por año, y les va de maravilla. Es por esta cosa de no entender calidad por sobre cantidad por las que se quedan perpetuamente atrás, DW. Aunque se pasen uno o dos años sin películas, será mejor invertir sus esfuerzos en proyectos más memorables y autorales, que-- ah, esperen. Este año sale Trolls. Porque hacía falta eso, ¿no? Olvídenlo. Ya es demasiado tarde. De seguro a este paso ya tienen pensado Home 2, Home 3, Home 4ever, y al menos un spin-off. Causa perdida.


#4
Tomorrowland
dirigida por Brad Bird

Uf, pero Disney no se queda atrás en esto. Si se trata de decepciones, este año no vi a ningún autor de renombre caerse tanto y tan dolorasamente como Brad Bird. The Incredibles, Ratatouille, M:I - Ghost Protocol... y ahora este wáter tapado. Si hay alguien que sabe de cine divertido, debería ser él. Okay, siendo justos, hay cosas interesantes aquí. Hay una escena de acción bien armada y un concepto interesante con respecto al ítem central de la película, un pin, sujeto en esta foto como si fuera un chicle masticado (o sea, sujeto de acuerdo a su valor). Sin embargo, todo lo que rodea a estas dos ideas está tan mal que me cuesta creer que es Brad Bird. ¿No será un typo? ¿No será Brid Bard el director real de esto? Sigh.

Brad Bird, un tipo de un cine tan honesto y entusiasta por la acción y el ver a sus personajes crecer y cambiar, terminó haciendo básicamente un comercial. Porque para cambiar y ser mejor persona, para cambiar la sociedad, no basta con la intención, tienes que venir a Tomorrowland™... una atracción real en los Disneylands reales. La película parte con el protagonista subiéndose al It's a Small World en Disneyland, por Dios. Vengan a Disneylandia, donde no sólo ustedes podrán pasarla bien con los paseos que tenemos, sino que además podrán unirse a nuestro Illuminati. Qué cuestión más sintética y forzada. "Vengan al Fantasilandia, que en el Evolution ustedes podrán viajar en el tiempo para así mejorar el presente a partir de lo que ven en el futuro. ¡Sean mejores personas!", dale.

Pero estoy consciente de que no es la primera vez que Disney hace algo similar. Recordemos que una de sus mayores franquicias, Pirates of the Caribbean, es originalmente un paseo en sus parques. Sin embargo, al menos esas películas hicieron un trabajo tan bueno que Jack Sparrow, Will Turner y Elizabeth Swann son personajes más reconocibles que su propio paseo ya. ¿Aquí que tenemos? George Clooney teniendo una muy palpable tensión sexual con una niña de 12 años, puteadas generales a tí y a mí por la situación de la NASA, y una historia que por más esfuerzo que le ponga sigue reduciéndose al "sólo tú podrás salvarnos". Es molesto, es creepy, es tu culpa, y tú no puedes hacer nada al respecto ... ¡a menos que vengas a Tomorrowland! Fuck you.

De nuevo, ¿es todo esto Brad Bird? ¿O es Papito Disney feat. Brad Bird? Sea lo que sea, Tomorrow is not enough.

#3
Terminator Genisys
dirigida por Alan Taylor

Apenas supe de la existencia de este proyecto, debería haberlo visto venir. Terminator 2: Judgment Day es una de mis películas favoritas de todos los tiempos, sin lugar a dudas. Sin embargo, las secuelas han ido yendo claramente en picada. Hay puristas que no les gusta T2 comparada a la original, y eso está bien, pero luego salió T3 y esos mismos puristas quedaron pensando que hacía que T2 se viera como T1. Luego salió Salvation, y ahora T3 era como T2. Ahora llega Genisys, y... ¿ahora hay que buscarle positivos a Salvation? ¿A eso hemos llegado?

Recién saliendo del cine me puse a armar un Top 10 de lo peor de esta película. Sentía que tenía que hacerlo. No tengo más palabras que decirle, esto es muy lo que es independiente de su contexto. Es horrible, fatal, un insulto, todo lo demás. Ahora sí que toca ser específico. ¡Un ranking dentro del ranking, Leo!

10. J.K. Simmons. Termina el 2014 con Whiplash y lo continúa con esto. Esto sí que me da whiplash.
9. "Pops". Ya sabes, esa máquina intimidante, el T-800... ahora es el "abuelo", y le dicen pops. Hay un juego de palabras aquí, que es también porque sus articulaciones hacen un pop, pero... de nuevo. Terminator.
8. Querer ser Hunger Games. Sí, si no lo adivinaste con el "pops", estamos apuntando a un público agresivamente joven. Sarah Connor plagia a Katniss cuando ella le lleva la ventaja por al menos 20 y tantos años, y el "will-they-won't-they" es enfermante en este universo. Ni T3 se dignó a ello.
7. "Genisys". ¿La trama de esta película gira en torno a una especie de Dropbox? No sé, una app que está en todos lados y que funciona en la nube. Todos están re-hype por ello. Estúpido. Y su mascota es un niño real. Genial saber que el Project Milo fue útil al final.
6. ¿Oye y ese quién era? Sí, si esta es tu primera película de Terminator, ¡buena suerte!
5. El T-1000. Uno de los villanos más icónicos y terroríficos de los 90s vuelve en gloria y majestad... por 10 minutos al comienzo de la película. Jamás vuelve o se le menciona de nuevo. ¿Para qué se molestaron, para satisfacer a las audiencias surcoreanas a través del actor que lo interpreta? Ok, gracias.
4. El final. Spoilers, pero a quién le importa. Un literal sermón que le dicen a un niño de 12 años para que se acuerde en el futuro (táctica súper confiable), y Sarah Connor liberándose de las garras del destino diciendo "I can choose now" con toda la intención de querer ser nominada al Oscar o algo. Convulsión.
3. John Connor. Trailer o no, apenas lo ves sabes que es el villano. Zzzz.
2. John Connor. Este Terminator es una mierda. Los anteriores daban miedo de lo estoicos y determinados que eran. No eran seres con razón y ni las balas iban a ayudar, te iban a matar y punto. John Connor, por el contrario, no cierra el hocico tratando de convencerte a unírtele (!!), y... vaya forma en que los imanes lo hacen bolsa. Aprende de la T-X, weono.
1. LA ACTITUD. Todo lo demás hubiera sido perdonable si no fuera porque Sarah y Kyle Reese (entiéndase como cabros chicos) se pasan todo el rato putéandose. O si no, se la pasan ping-poneando con Arnold, mandándose y devolviéndose oneliners. Un tedio exasperante.
Pero hey, tenemos un positivo igual: nadie se quedó para el post-crédito cuando la vi. Nadie quería seguir con esto. Yo tampoco. I can choose now.


#2
The Assassin
dirigida por Hou Hsiao-Hsien

Mil disculpas a Something in the Air y Neruda, que esta... wow. WOW.

Sí, hay trama aquí, y una buena cinematografía y dirección de arte... ¡pero eso es todo lo que tiene, sinceramente! Y no es que el resto sea fatal, sino que simplemente no existe. Esas otras dos películas no tendrán mucho que contar dado su contexto histórico, pero al menos puedo decir que tienen edición, actuación, díalogos, o una que otra escena interesante. The Assassin literalmente no tiene nada de ello -- es más, puedo decir que ni siquiera tiene movimiento por al menos 90% de su duración, ya que la gran mayoría de sus tomas son estáticas y gélidas, todo para que puedas disfrutar lentamente el lujo puesto en escena, a costa de tener pulso o emoción. O sea, piensen en Only God Forgives, pero mucho, mucho, mucho más inerte.

Y obviamente, es considerada como una de las mejores películas del año. No sé qué cresta le pasa al mundo.

Esta película y su recepción han sido el mayor acto de snobismo que he visto en años. Críticos por aquí y por allá, todos deslumbrados ante sus visuales que son como "mirar dentro de un joyero", donde lo que importa "no son los movimientos, si no la riqueza visual", ya que "para qué molestarse en hacer otra película de artes marciales más". Asco. Miren la competencia que esta película dejó atrás en el polvo: Mad Max, Inside Out (vengan a decirme que The Assassin es más rica visualmente que estas dos...), Amy, 45 Years, Tangerine, entre muchas otras. Miren esta última, que hasta una película hecha con un iPhone 5s tiene más movimiento, expresión y propósito porque entiende que así funciona el cine. ¿Esto qué tiene? ¿Esto qué es? Podrían cortar esta película por tomas para subirlas cada una a Vine, y estamos. Si quieren fotos bonitas con un microscópico toque de movimiento que es más un efecto óptico que algo real, ahí tienen. No me vengan a decir que esto es la mejor del 2015 como si ustedes fueran a ponerse mega hype cada vez que se topen con ella en Netflix. "¡Woo, The Assassin! Qué emoción". Zzz.

Fun fact: 16 personas se pararon y se fueron en medio de su estreno en el SANFIC. Contar gente yéndose era más divertido que ver esta mano de pintura secarse.

#1
Ronaldo
dirigida por Anthony Wonke

Esta es la cosa: todas las otras películas que mencioné antes al menos tienen algo a favor, sea un legítimo positivo como la cinematografía de The Assassin, la (a pesar de todo) afable disposición de algún actor como George Clooney, Arnold Schwarzenegger o Mark Walhberg, o la novedad del asunto, que por más fallida que sea, sigue siendo una novedad, como lo sería Unfriended. Todas estas películas tienen algo a favor que al menos se les pueden rescatar y referenciar a futuro. Aquí en Ronaldo no pasa tal cosa. Es sencillamente el mayor gasto de horas hombre y recursos cinematográficos que vi en el 2015. Todo este esfuerzo para ser un cero creativo a la izquierda.

¿Y porqué no iba a ser otra cosa? Esta película no es un producto del arte: es un proyecto que encargó un cliente para mejorar su imagen. No sé qué habrán visto Anthony Wonke y Asif Kapadia (¡de todas las personas, Kapadia!) en este material como para considerarlo digno de estudio e investigación, pero sí sé que al menos para Cristiano Ronaldo hay cosas aquí que ameriten tal esfuerzo. Después de todo, es su película oficial, contada por él mismo ni más ni menos, sobre su vida y sus logros, éxitos, premios, reconocimientos, galardones, aplausos, méritos, trofeos, conquistas, victorias, y otros gustos personales. Es que este es un tipo tan humilde y aterrizado que necesitaba montar un documental para hacértelo saber.

Podría perfectamente hacer un Top 10 de los momentos más soberbios de CR7 en esta película tal como con Genisys, incluyendo la escena en dónde juega con su hijo a adivinar cuál es el auto de lujo que falta en el garage porque lo mandaron a arreglar ("el Lamborghini, papá"), o la escena en la que cuenta cómo es que ayudó a su hermano a escapar del alcoholismo consiguiéndole un empleo como el administrador del... museo oficial de Cristiano Ronaldo. Sin embargo, en vez de hacer eso, creo que sería mejor enlistar todas las cosas que no se hablan o apenas se susurran en este documental, ya que podrían, bueno, incomodar al protagonista. Este documental es *su* momento, no hay para qué agüar la fiesta con transparencia. ¿Listos? Aquí vamos.

¿Quién es la madre de su hijo? ¿Cuál es el motivo del secretismo detrás de la identidad de la madre de su hijo? ¿Porqué vive prácticamente solo? ¿Qué le significa haber jugado en el Sporting de Lisboa? ¿O en el Manchester United? ¿O en el Real Madrid? ¿O el haberse convertido en el capitán de la selección portuguesa? ¿Es gay o simplemente metrosexual? ¿Qué onda con todos los viajes a Marruecos que hace? ¿Qué tiene de particular su técnica y habilidad con el balón como para considerarle el mejor del mundo? ¿Qué opina de Lionel Messi? ¿O de Wayne Rooney? ¿O de Íker Casillas? ¿O de los diferentes entrenadores que ha tenido a lo largo de su carrera? ¿Cuál fue su mejor partido? ¿O su peor partido? ¿Cuál es su mayor anhelo? ¿O su mayor frustración? ¿Cuál es su mayor temor? ¿O su mayor referente futbolístico? ¿Cómo planea retirarse? ¿Qué tipo de legado se imagina que dejará a las siguientes generaciones de futbolistas?

Todas estas preguntas se me ocurren que pudieron haber sido material a investigar tratándose de Cristiano Ronaldo, y eso que no soy documentalista. Pero los que si lo fueron aquí, vaya forma de decirle que sí a todo lo que CR7 quiso. Nada fome para él. Los mismos ratos buenos e inocentes con su familia, seguidos por un partido intrascendente (Portugal en Brasil 2014 fue intrascendente, pues), luego por un montón de comentarios que tienen que estar subtitulados porque están en masturbés, y el ciclo se repite hasta que la película complete su viaje, yendo desde que la vez que recibió el Ballon d'Or 2013, hasta un año después, cuando recibió... el Ballon d'Or 2014. Ugh. Cómo chucha es que tengo a Fifty Shades of Grey en esta lista, y aún así esta película logra ser todavía más pornográfica que esa. Una autofelación cinematográfica, totalmente.



Pero si son asiduos a este blog, saben que la fiesta de mierda aún no termina. ¿Cuál fue legítimamente la peor película del año? ¡Sorpresón!

#0
Fantastic Four
dirigida por Josh Trank

Mentí. No hay ningún sorpresón. Y en verdad, a estas alturas no sé si habría que decir que hay alguna sorpresa en pensar que una nueva película de Fantastic Four sería mala. ¿Cuántos años llevan ellos ya tratando de adaptarse al cine? ¿Y cuán difícil realmente puede ser? No se trata de, um, Guardians of the Galaxy, Ant-Man o Deadpool (con esto me refiero a personajes que no son tan parte del vox populi); sino que se trata de los Cuatro Fantásticos. Un pilar tan fundamental de Marvel como los X-Men o Spider-Man. Son muy parte del consciente popular, pues. Si no me creen, ¿de dónde creen que salió la idea para los personajes de The Incredibles?

Y aún así. Mismo cuento de siempre. O quizás, ¿tal vez no? Las películas anteriores eran estúpidas pero al menos tenían su humor que le daba su humanidad al asunto. La mayor evidencia de lo descorazonada y apática de todo esto está en el culo desnudo de The Thing, que anteriormente, a pesar de su cuerpo de roca, jamás dejó de considerarse un humano, y por ello actúa y se viste como uno a pesar de todo. ¿Aquí? Nah. Con el poto al aire, que total es de piedra. Qué le van a decir. Qué le va a importar. O sea, la gente aquí ni siquiera leyó alguno de los cómics para estar al tanto e interesarse por la historia, para poder actuar mejor sus partes. Buena movida, Josh.

E incluso si omitiéramos eso (por ejemplo, digamos que esa pudo haber sido algo hecho a consciencia por uno que otro motivo defendible), tenemos un sinfín de problemas aquí que condenarían el proyecto a tal punto de que el hecho de que el villano se llame Dr. Doom sería un detalle irónico. Nadie aquí demuestra la más mínima cuota de carisma o química. Nadie quiere estar allí. Nadie quiere estar en una película que sólo existe para que el estudio pueda mantener los derechos exclusivos sobre los personajes y no se los tengan que devolver a Marvel. Esa es la cosa: nadie quiere tener algo que ver en todo esto. Anastasia Steele quería firmar ese contrato en Fifty Shades of Grey. George Clooney se quería tirar a esa cabra chica en Tomorrowland. The Assassin quería verse bonita a pesar de todo. Ronaldo quería hacer un 69 consigo mismo. Todos ellos querían algo, querían reflejar una intencionalidad. Aquí no, nadie quiere nada aquí, y esta poca gana sólo te puede llevar hasta cierta parte bien limítrofe. ¿Cómo es que Le Quattro Volte tiene un tercer acto que es exclusivamente sobre un árbol de verdad cualquiera, y aún así tiene más interés e intención que una película hecha por Josh Trank, quién reavivó todo un género de cine con Chronicle?

Me fallan las palabras como para dar con el culpable en todo esto. FOX, por intentarlo y demorarlo; Trank, por conducir esto hacia un vacío; o el reparto (que incluye a Miles Teller -- uf, pésimo año para el equipo Whiplash), por ser totalmente incapaz de tener carisma en el asunto. Solo sé que al menos las otras películas que he mencionado lo intentaron. Lo hicieron mal, pero su razón de ser es palpable. Esta película es un tumor, un cáncer. Pasó porque sí, nadie lo quiso, y después de que se fue perdiste algo importante -- ¿volverán a darle chances a Fantastic Four en el futuro? Puta, ¿le volverán a dar la misma chance a Josh Trank siquiera? Quizás la toxicidad radiactiva de esta película sea demasiado importante como para aventurarse a pensar en ello. Incluso si la franquicia se devuelve a Marvel tendrían que hacer trabajos titánicos de limpieza para distanciarse de esto.

Sin dudas la peor película del año. Esta película es tan gris mezclada con beige que simplemente no tiene ganas de existir -- incluso post-mortem. No tiene respeto por la audiencia nueva o vieja. No está ni ahí. Es lo más protocolar que he visto en años: sólo existe para cumplir con una obligación legal. Este es un lento y deprimente suicidio creativo -- y en un género que incluye héroes hechos de rocas, capaces de estirarse y deformarse, volar en llamas y hacerse invisible a voluntad; tanto desgano es imperdonable.


Uf. No fue un buen año, pero desde lo más bajo sólo podemos ir a un lado, ¿no? Vuelvan aquí dentro de unos días para que cerremos el 2015 con lo mejor -- y vale la pena decir que aunque este año fue rico en putrefacción y mediocridad, cuando fue bueno...

... fue bastante bueno.