Lamentablemente, esta franquicia no recuperó la adrenalina y la potencia conceptual de su primera entrega; y por más movedizo que sea este cierre, sigue siendo igual de lento, gris y anti-sutil que las otras secuelas. Aún así, tiene una refrescante cuota de variedad y urgencia, pero ella llega tras una hora y algo de nada.
** 1/2