Sea apropiado o no, la historia de una esposa aburrida se pudo haber contado de una manera menos aburrida. El exquisito vestuario y la banda sonora apenas maquillan un relato somnífero y abominablemente victimizante. Wasikowska se luce una vez más con el corset, pero aún así son dos horas con un personaje muy desagradable.
* 1/2