Sigh. De que es importante, lo es, pero esto es mortalmente fome. Esto no es un documental: esto es apenas una evidencia de que alguien contactó a Snowden. Cero edición y narrativa. Vaya que le faltó un Alex Gibney o un Morgan Spurlock al proyecto -- sí, habría salido más como un videoclip, pero al lo menos le habrían inyectado vida y propósito.
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