Bastante potente actoralmente y de una muy pulcra producción, pero aún así algo monótona. Johnny Depp se sale de su zona de seguridad con impactantes e irreconocibles resultados, y el resto del reparto no está muy lejos de ello también; pero sin necesariamente tener que ser aburrida, la historia va muy precisamente donde más te lo esperas.
Hanks y Spielberg siguen satisfaciendo -- más por carisma que por cualquier otra virtud, pero satisface igual. Cercana a Argo pero con bastante menos revoluciones por minuto, ofrece un carácter encantador y conciliador en los paranoicos años de la Guerra Fría; aunque a pesar de este contexto el drama y la tensión no sean lo suyo. Fraterniza más que engancha.
Pudo haber sido algo especial y diferente, pero cae en lo "porque sí" fácilmente. Tiene escenas de acción y egos tan fuertes como bien ejecutados; pero no aprovecha lo stoner o lo amoroso realmente como para darle maravilla o algo de confusión y sorpresa a su conspiración de poca imaginación. Kristen Stewart mantiene su muy buen año, por lo menos.
Aún con su material nunca antes visto/oído se va mucho a lo Behind the Music (drama y dolor por sobre cualquier otra cosa), pero sea como sea hace un potente trabajo contextualizando sus canciones (ya de por sí brillantemente agridulces), y explicitando lo carroñero y miserable que puede ser la industria pop, incluso con sus más talentosas y vulnerables figuras.
A ratos intensa, pero a grandes rasgos es relativamente genérica y virtualmente sin trama. Bordeará a Malick con sus meditaciones e ires y venires, pero es tan mínimamente caracterizada que más que nada se trata de ver a los personajes ir de un punto a otro, peleando y conviviendo, y reflexionando al respecto. Bien hecha, pero poco más.
Dónde estuvo este Shyamalan. Sí, finalmente dará con una buena, pero ello se legitimiza aún más con todo lo que logra por el género del found footage: es tan familiar y mundana como es tétrica y ennervante; siempre elegantemente zigzagueando entre el humor meta y lo espeluznante visto de reojo. Si esto no es un comeback, no tengo idea qué es.
Butterfield demuestra grandes compromisos actorales, pero este material llega a ser un poquitito Extremadamente Fuerte e Increíblemente Cerca, si saben a qué me refiero. El autismo será una cosa, pero aún así es una película bien fácil de odiar con todo su desagrado e ensimismamiento, y apego al cliché manipulativo. Hecha para premios, poca pasión propia.
Buena actitud y música, pero... ¿resultados? Cuenta con interesantes contrastes y transiciones entre lo nerd y lo pandillero, y lo clásico y lo nuevo; pero es tan errática y fragmentada que no pareciera tener algo contundente que decir. Todo se da demasiado fácil, rápida y aleatoriamente como para significar legítimamente (hablando especialmente del sermón final).
Lo intenta con esmero, pero la versión real sigue siendo la mejor. Tendrá buen ritmo y un tono muy para toda la familia, pero al final no logra superar a Man on Wire: plástica, formulaica y sólo superficialmente informativa. Sin embargo, cuando se trata de LA escena importante, todo el vértigo al que sólo aludió el doc se materializa aquí con mucha tensión.
Divertida e hipnotizante como un buen programa del Discovery Channel; pero quizás con un similar nivel de intriga. No me malinterpreten, que aquí sin dudas se pasa muy bien con todas sus posibilidades y su relajado humor; pero con tanta metodología y explicación no hay mucha cabida para la tensión -- o siquiera la urgencia, con este paso del tiempo.
Buenos efectos audiovisuales; pero esto es un montón de nada. Una hora para subir la montaña y la otra hora para ver a los personajes morir lentamente -- y con la mínima caracterización que tienen, es una cansina y poco recompensante espera hasta los créditos finales. Tendrá un reparto de lujo, muy competente y todo, pero no se logra mucho con este material.